CUCARACHA
el bandolero
- Armando Sanjuán, Presidente de la comarca de Los Monegros y alcalde del Ayuntamiento de Lalueza
UN PAÍS acumula una sucesión de problemas cuando sufre una aculturación invasiva desde otras latitudes y altitudes hasta el punto de irse al bosque de Sherwood a encontrar a Robin Hood a pesar de tener en los Monegros, el Cinca y La Litera a Mariano Gavín Suñén, que como el Hood fue reconocido por las clases humildes como el que robaba a los ricos para dárselo a los pobres. En torno al de Alcubierre se han tejido literatura, música, títeres y próximamente teatro, con importantes esfuerzos divulgativos que encuentran ahora el colofón con “Cucaracha, el bandolero”, una interpretación a cuatro manos virtuosa de ese dueto de la cultura aragonesa que son José Antonio Adell y Celedonio García, bajo edición de Pirineo.
La primera novela de Adell & García, que presenta en Sariñena el jueves otro audaz como Salvador Trallero, es la consecuencia de la transformación narrativa de su esfuerzo investigador y documental a través de una ambientación serena pero precisa y una estructura concebida a través de idas y venidas en la cronología que mantienen la tensión a golpe de trabucazos y cabalgadas. Un recorrido por los agrestes paisajes monegrinos, los peligrosos ríos y una urdimbre argumental en el que participan caciques y pobres, alcaldes y pastores, guardias civiles y carlistas, amantes, bandidos de ida y vuelta, siempre alrededor del halo del Cucaracha.
Hasta el desenlace fatal para Mariano en el Corral de la Nica por la perspicacia del joven cuerpo de la Guardia Civil encarnado en su teniente Lafuente, enseñanzas de vida y costumbres, diálogos espléndidos como el del rico Ruata y el Cucaracha, criterios para que el lector descubra que ni es oro todo lo que reluce ni la maldad es patrimonio del bandolero.
https://www.diariodelaltoaragon.es/noticias/opinion/2021/05/11/cucaracha-el-bandolero-1491162-daa.html
"Cucaracha, el bandolero" (a partir de 1:37:00)
Es prácticamente imposible que quienes le conocieron, que fueron muchos, no recuerden alguna anécdota que resalte su personalidad. Participaba en todas las carreras que podía de su tierra, Aragón. Organizó y recuperó numerosas pruebas que durante siglos habían sido tradicionales en diversos lugares, especialmente en las Cinco Villas. Muchos le recordarán en la "carrera del gallo" de Luesia, durante las fiestas del la Virgen del Puyal, y por la acogida que recibían en su casa los corredores disfrutando de una suculenta costillada de cordero. Le veíamos en muchas carreras pedestres y todos los premios y primas que obtenía iban destinados para la restauración de la ermita de su pueblo, de Luesia. También le podíamos ver en otro tipo de carreras, como por ejemplo la carrera del Ebro, haciendo de guía de Jean Pedraza.
Destacó obteniendo buenos puestos en Campeonatos del Mundo de Veteranos. Era otra de sus pasiones.
Todos nos acordamos de él porque casi todo lo que hacía era para complacer a los demás. Se ganó nuestro cariño y nuestro eterno recuerdo D.E.P.
Muchos no podremos acompañarle en el funeral por las restricciones actuales del covid-19 en las Cinco Villas, pero bien merecido tiene un homenaje al que no faltaremos.